La esencia Bedunia regresa como cada año a Salamanca fruto del interés por recrear una Navidad diferente, especial, propia, llena de recuerdos de una infancia no tan lejana o sí, en espacios públicos y privados para conseguir ambientes únicos, cuya decoración rezume un sentido especial, característico de esta época.
A punto de celebrar nuestro 30 Aniversario, en Floristerías Bedunia presentamos la línea de decoración navideña, diseñada especialmente para grandes espacios, tomando como referencia la iluminación, elementos adyacentes, así como los colores de las diferentes estancias en las que intervenimos. Originalidad e imaginación conviven en diferentes estilos para generar armonía con el lugar en el que nos encontremos, con el propósito de generar un ambiente único que envuelva al visitante impregnándolo de todo el sentimiento navideño. Estilos que, en algunos casos, pueden convivir y mezclarse dejando a un lado los límites de la decoración consiguiendo propuestas únicas y atrevidas.
La diversidad de materiales, colores, formas, texturas son fundamentales para encontrar propuestas decorativas adaptadas a cada gusto, pero siempre acordes con los espacios que decoramos. El propósito es claro: potenciar cada rincón donde Bedunia trabaja, implementándolo con vida en pasado tirando de la infancia y en futuro cuando volvamos de una forma u otra a ella. Así cada visitante hará suya la decoración, sintiéndose como un elemento natural y no extraño.
En nuestro escaparate en la tienda de Muñoz Torrero hemos empleado una base de la tendencia Escandinava, con un estilo sereno, que refleja la belleza natural de la luz de invierno. Técnicas artesanales combinadas para crear un ambiente natural. Madera sin tratar, con raíz de musgo y en ese ambiente de relax la imagen por antonomasia de la música, un piano donde colocar el misterio de la Navidad. En nuestra tienda de la Avenida de Maristas a toda la idea expuesta en Muñoz Torrero le añadimos luz y color con un material nacarado en las bolas del árbol que destilan alegría a raudales.
En el Palacio de San Esteban damos rienda suelta a nuestra imaginación creando un bosque de abetos y decorando estos con una línea renacentista, donde la importancia de lo profuso y el tamaño de los artículos que decoran cobran una importancia mayúscula. Un bosque que tiene una animación u otra dependiendo desde qué prisma se mire, parte baja de la biblioteca, escaleras o parte superior; lo mismo toma una dimensión diferente. En el hotel Alameda Palace proponemos una mezcla de base nórdica donde la madera en troncos sin tratar y el color blanco de la nieve en polvo realzan las capas del misterio de la Navidad. Realizado en la mesa central se convierte en la pieza más importante de la estancia y lo que da la bienvenida al hotel. El árbol de Navidad en la misma línea que el motivo central genera una corriente de apoyo cromática. La sobriedad del Ayuntamiento de Salamanca requiere una modificación del la línea renacentista para no crear un conflicto de atención en la estancia que se encuentra donde lo más importante es el blasón de la ciudad. En otros espacios, como el Hotel Corona Sol, o el Centro de Resonancia Magnética ubicado en el palacio de Llen, la línea es de diseño más vertical y lineal dando importancia a la textura más que a los tamaños o los colores. La última actuación de esta navidad ha sido en la Plaza del Oeste convirtiendo el antiguo quiosco de prensa en una vivienda nórdica, envuelta en musgo y cedro generando ese ambiente navideño que se respira en cualquier mercadillo navideño del norte de Europa. Y por todo ello GRACIAS: somos intensamente felices cuando nos dejan expresar nuestra forma diferente de proponer la Navidad. |